Luis Merayo: Caminando

Caminando por EL CAMINO….

El hecho de haber realizado el Camino obedece a tres razones…., la primera porque tenía hace mucho tiempo ganas de hacerlo, la segunda por que al haberme quedado sin trabajo era el momento ideal para hacerlo, porque tenía tiempo y porque necesitaba un tiempo para mí, para encontrarme, decidir….y la tercera porque al haber sufrido un infarto tan fuerte hace justamente un año, necesitaba ponerme a prueba físicamente…….

El haberlo realizado desde O Cebreiro es porque debido a mi estado de salud me pareció una distancia óptima para no forzarme demasiado y al mismo tiempo conocer más profundamente mi tierra y los ríos que atraviesan el Camino.

Por todo lo expuesto anteriormente me lancé al Camino.

Día 13 de Octubre….desde O Cebreiro a Triacastela (21,2 km):

En mis planes estaba comenzar el lunes 14 el Camino hacia Triacastela pero una serie de hechos……., O Cebreiro estaba lleno de gente, parecía Marbella en verano…, me cobraron un barbaridad por comer, de esto se aprende rápido…., no me dejaban entrar en el Albergue hasta las siete de la tarde por ser mi primer día….., así que me como eran las tres de la tarde me dije….”pues me acerco hasta Hospital que está cerca y así me voy poniendo a prueba” …y dicho y hecho….

allá comencé a andar saliendo por la trasera del albergue por un camino que, serpenteando por las laderas cubiertas de pinos del monte pozo de Area,(aquí caminé e hice mi primer conocido, un chico francés – Louis Maxime-) acaba por desembocar en una pista, que girando a la izquierda nos llevó hasta Liñares, primer pueblo desde O Cebreiro.

En vez de continuar por asfalto, descendimos un trecho por una pista y retornamos por la ladera, junto a prados, acebos y avellanos, marchando en paralelo a la calzada hasta llegar al alto de san Roque (1.270m).

Por un camino a la derecha de la carretera avanzamos rápidamente hasta Hospital de la Condesa, donde Louis decidió quedarse y yo, como me encontraba bien, decidí seguir hasta el Alto do Poio. Para ello una vez pasado el Albergue y, habiéndome despedido de Louis, tomé un desvío hacia Sabugos y Temple, que al llegar al km 144 abandoné para subir por un sendero a la izquierda y entrar en el pueblo de Padornelo, de donde se sale junto al cementerio y comencé el ascenso, mi primera prueba en cuesta, dura…, para llegar al Alto do Poio (1.335 m).

Después de descansar un momento y beber un agua en el Albergue de Poio, decidí, una vez más, continuar camino y hacer la etapa completa, que bien me encontraba…, así que animado continué, lloviendo, por la carretera hasta que por la derecha aparece un sendero, indicado para peregrinos, que me lleva hasta Fonfría. Poco después entré en el ayuntamiento de Triacastela. Avancé por la izquierda de la carretera y, entre robles, acebos y helechos, llegué a la población de Biduedo.

Saliendo de Biduedo me encaré hacia el monte Caldeirón y comencé un durísimo descenso hasta Filloval, nunca creí que lo más duro de una caminata fuese bajar, desde donde continué el descenso, tras cruzar la carretera y girar a la izquierda entre carballos. Nuevamente volví a atravesar la carretera y a la izquierda entré en Pasantes. Por un camino de robles y carballos llegué a Ramil, donde ya de noche entre, poco después, en Triacastela.

Nada más entrar en Triacastela pregunté en el primer albergue a la derecha si tenían cama y me dijeron que estaban llenos y así, comencé mi peregrinaje en Triacastela buscando cama, negativa tras negativa por ocupación hasta que, de un Hostal que estaba lleno me ofrecieron una cama en otro a 40€, bufffffffff mi genio gallego saltó y, alto y claro le dije a la señora…”oiga que iso non o pago nin no Ritz, que eu son da terra, vaia enganar a outro, así nos vai neste país…..non me diga mais, vou durmir a Sarria”…..que mal momento…, pero un poco más abajo en otro albergue, el Aitzenea, me dieron alojamiento por 10€ y me trataron con gran amabilidad. Así que tranquilamente me di una ducha reconfortante y me fui a cenar al Xacobeo un delicioso churrasco y luego a dormir para recuperarme para la próxima etapa.

Día 14 de Octubre – TRIACASTELA – SAMOS –SARRIA (21,2 km):

Al salir de Triacastela, hay que elegir que ruta queremos realizar, a la derecha más corta, la de San Xil y a la izquierda, más larga, la de Samos.

Para mí la decisión fue fácil…..elegí la ruta de Samos, el por qué era claro, quería recorrer el cauce del rio Oribio y aunque lo había pescado en numerosas ocasiones, ahora tenía la oportunidad de recorrer entero los cotos de Alto Oribio, la zona libre sin muerte y el coto de Frollais. Fueron numerosas las veces que me desvié del camino descubriendo y estudiando nuevos escenarios de pesca, valió la pena. Dentro de Galicia, considero esta etapa la reina de la pesca en el Camino.

FERVENZA

Para realizar esta ruta seguí el cauce del río que va prácticamente paralelo al Camino, por un valle encajado entre montañas acompañado en todo momento por robles, abedules y algún que otro Castaño. Después del puente crucé a la derecha para descender por una pista asfaltada a San Cristobo do Real. Crucé el río y salí junto al cementerio por un bello camino entre castaños y robles.

Varias veces crucé la corriente al pasar por Renche, Lastres, y Freituxe y, dejando por la derecha San Martiño do Real, atravesé la carretera LU-633 y descendiendo por un camino, que desde el alto, nos ofrece una visita hermosa de la parte trasera del Monasterio de Samos, llegamos al pueblo.

Recorrí todo el monasterio realizando el recorrido circular y aproveché para tomar un refrigerio, y aquí otro cabreo, entro en uno de los múltiples bares que circundan el monasterio, pido un agua y algo para picar, me ofrecen la carta y esta sin ¡¡precios!!!..., así que decidí pagar el agua y ante la extrañeza de la camarera me fui, no vaya a ser que me cobrasen lo que les diese la gana…. Encontré un bar más honrado justo en la espalda del Monasterio y aproveché para comer de bocata caliente.

Después de reponer fuerzas continué caminando en dirección al parque de la ribera del Oribio y continué por el camino para peregrinos junto a la carretera, con numerosas zonas de descanso y arboles jóvenes. Fui dejando a un lado Foxos, Ferreira, Teiguín y Sancobade. Un cambio de dirección a la izquierda y subí hasta Pascáis. Aquí de nuevo me tocaba elegir en continuar siempre por la carretera hasta Sarria o internarme por caminos entre las pequeñas aldeas, siempre al lado del río, como Gorolfe, A Veiga de Reiriz, Sivil y Perros. Siguiendo este camino pronto me uní en Calvor al camino de San Xil.

Al salir de Calvor caminé junto a la calzada pasando por Aguiada, San Mamede, San Pedro do Camiño y Vigo. Ya llevaba tiempo viendo a lo lejos Sarria pero el camino se me hizo un poco largo, debido a venir por la ruta más larga y por los numerosos desvíos que hice sobre el río.

Una vez alcanzado Sarria crucé de nuevo el puente sobre el Oribio y subí hacia la zona alta del pueblo alojándome en el Albergue Mayor.

Una vez duchado, disfruté de una agradable cerveza con mi amigo y compañero de pesca, residente en Sarria, Javi López.

Día 15 de Octubre – SARRIA – PORTOMARÍN (21,5 km)

Me levanté temprano, descansado después de un reconfortante sueño, y me preparé para realizar la tercera etapa bajo la lluvia.

Subiendo desde el albergue partí en dirección al convento de la Magdalena, acompañado por Inés, una señora afincada en Cádiz y natural de Chile, charlando animadamente, compartimos esta etapa.

Una vez visitado el convento y sellado la credencial descendimos junto al cementerio. Llegamos a la carretera que une Monforte de Lemos con Lugo y continuamos por ella (no me gusta nada caminar por el asfalto) hasta abandonarla por la izquierda y cruzar por la “Ponte Áspera” el río Celeiro, junto al que continuamos unos metros. Atravesamos el ferrocarril y poco después un arroyo. Giramos a la derecha siguiendo el curso del rio y alejándonos de la vía. Ascendiendo entre viejos robles y castaños llegamos a la aldea de Vilei, junto a la que se encuentra Barbadelo.

Tomamos un desvío a la izquierda en el km 100,5 a Rente. Por asfalto (buff) llegamos a Mercado da Serra. Cruzamos una pista y la carretera que une Sarria y Portomarín y entramos en Mouzós, seguidamente por Xisto, Domiz y Peruscallo y poco más adelante Cortiñas y Lavandeira desde donde partimos, de nuevo, por asfalto. Atravesamos el arroyo Cheto para alcanzar Brea. Continuamos por el monte Morgade, y en el km100 Morgade. De nuevo por corredoira atravesamos el arroyo Ferreiras y ascendimos a Ferreiros y más tarde a Mirallos y Pena. Por asfalto llegamos a las aldeas de Couto y Rozas. Al llegar al km 96,5, tomamos un camino a la derecha que nos condujo por un pinar entre robles hacia la Pena do Cervo. Desde allí descendimos a Moimentos. Por carretera y después por un camino alcanzamos Mercadoiro y, de nuevo por asfalto, Moutras (río Bocelo). La carretera desemboca en otra. Tomamos la carretera en dirección a Tellada que abandonamos por la derecha por un camino hacia Parrocha. De aquí salimos, por asfalto, para girar después a la derecha por un camino que, tras cruzar la carretera entra en Vilachá. Fuimos bajando por una empinada cuesta y nos dirigimos hacia el río Miño, zona del embalse del Belesar, muy bajo de agua y que hacía altísimo el puente hacia la localidad de Portomarín, donde ascendimos por una escalinata y nos hospedamos en el albergue Municipal.

Día 16 de Octubre – PORTOMARIN – PALAS DE REI (25 km):

Continúo esta nueva etapa en compañía de Inés. Bajamos de nuevo hacia el río Miño hasta la carretera LU-633 para atravesar por una pasarela el embalse de Belesar. Por una pista asfaltada seguimos el curso del arroyo Torres y ascendimos por el monte de San Antonio. En el km89 nos desviamos a la izquierda por un camino por el que continuamos el ascenso entre pinos, robles y castaños. La carretera discurre cerca y la retomamos después de salvar el desvío a San Mamed para caminar paralelos a ella hasta el Km87. Después la cruzamos a la derecha (fábrica de cerámica y granja). Más adelante volvemos al margen izquierdo, a la altura de una granja y proseguimos entre tierras de cultivo y pinos. Llegamos a Toxibo. Avanzamos a la salida junto a la carretera unos metros para en el km83,5 tomar un desvío. Nos acompañan abedules, robles, pinares y campos de cultivo. Después de un área de descanso con una fuente llegamos a Gonzar.

Desde aquí giramos a la izquierda por un camino y después a la derecha y entramos por una pista en Castromaior. Al llegar al km80 salimos a la carretera por la que avanzamos hasta Hospital da Cruz, adonde accedimos por un camino y desde allí ascendimos por una pista de asfalto. Por una pasarela salvamos la N-540 y continuamos hacia Ventas de Narón. Entre pinos subimos hacia la sierra de Ligonde y desde aquí comenzamos el descenso pasando por Prebisa, Os Lameiros y Ligonde.

Seguimos descendiendo hasta el río del mismo nombre y una vez lo cruzamos ascendimos esta vez, con ansia, hasta Eirexe para hacer la parada de la comida en el restaurante Conde de Waldemar, propiedad de mis amigos Oscar y Mónica, donde me esperaba un buen plato de caldo y el torno de montaje de Oscar.

Después de comer, Inés siguió camino hacia Pala de Rei, y yo me quedé charlando con Oscar de montaje y setas, amén de un par de cafés más (sin chupitos).

Tras despedirme de Oscar y su familia crucé la carretera de Monterroso y comencé a descender. Tras pasar Portos , Lestedo, Valos y Mamurria comienzan a aparecer los primeros eucaliptos, que pena. Después de Brea seguí por un camino paralelo a la carretera pasando por Lamelas. Subí el Alto del Rosario y al descender en el km 66,5 me encontré con una nueva área de descanso junto a las instalaciones deportivas y el campamento juvenil de Palas de Rei. Desde allí accedí al centro de la población en dirección a la iglesia de San Tirso.

En esta localidad me alojé en el albergue San Marcos, casi a estrenar y muy bien atendido, de lo mejorcito del camino.

Día 17 de octubre – PALAS DE REI – ARZÚA (30 km):

Hoy nos toca una etapa dura, Inés me vuelve a acompañar.

Después de la iglesia de San Tirso descendemos por la Travesía de la Iglesia y la Travesía del Peregrino hacia la carretera N-547. Avanzamos por la acera unos 100 metros y tomamos un camino a la derecha para cruzar el río Ruxián y retornar en el km 64 a la calzada. Poco después entramos en Carballal. Por una corredoira descendimos pasando por Alagua. Primero por una carreterilla y después por un camino entramos en San Xulián do Camiño. De nuevo marchamos por una pista hasta Pallota y por una corredoira salvamos el rio Pambre en Outeiro da Ponte.

Al llegar a Pontecampaña tomamos un camino de ascenso a Casanova (km 60) desde donde volvimos a bajar a orillas del río Villar pasando por Porto de Bois. A 1km se encuentra Campanilla, donde se toma la carretera, y en un bar, de igual nombre, tomamos una deliciosa tortilla española de Boletus Edulis riquísima. Poco después entramos en la provincia de A Coruña.

Por un camino empedrado llegamos a Leboreiro. En Disicabo salvamos el río Seco por el puente de la Magdalena y, por una pista, atravesamos un bosque y llegamos a Furelos. En dirección a Melide pasamos el puente sobre el río Furelos. Entramos en Melide por el barrio de San Pedro y por la calle Principal, salimos a la N-547 por el barrio de Santa María, desde donde tomamos un desvío hacia San Martiño. En el Km 50 giramos a la derecha (crucero) pasando el río Lázaro en dirección a Carballal. Atravesamos un bosque de robles, pinos y eucaliptos y cruzamos el río Barreiros. Un poco más adelante a Raído y de nuevo nos internamos en el bosque. Pasamos por Paravispo y el arroyo Valverde y descendimos hacia A Peroxa. Por una pista alcanzamos Boente, donde cruzamos la carretera general, una vieja carretera y por un túnel llegamos de nuevo a la N-547, para descender de nuevo al río Boente. Desde allí subimos a Castañeda y junto a unos prados llegamos a Pedrido. Bajamos hacia Rio (km 42) y allí salvamos el arroyo Ribeiral. Entre pequeñas huertas y prados llegamos a Doroña, desde donde subimos una loma entre eucaliptos, robles y pinos para descender y cruzar el tajo por el que discurre la carretera por un puente. En el descenso llegamos al río Iso, y a su orilla nos encontramos con el antiguo hospital de peregrinos de Ribadiso.

Abandonamos la ribera del rio Iso y, pasando por Ribadiso de Baixo y Ribadiso de Riba, atravesamos un túnel bajo la carretera N-547 a la salida del cual se encuentra Ribadiso da Carretera. Avanzando junto a la carretera N-547 llegamos por fin a Arzúa.

Nos alojamos en el Albergue Don Quijote y, gracias a Dios, que había poca gente y pude descansar a pierna suelta. Esta etapa fue un verdadero rompe piernas con tanta subida y bajada, aparte de lo larga que fue.

Día 18 de Octubre – ARZUA – PEDROUZO (19,5 km)

En la jornada de hoy me acompaña de nuevo Inés. Salimos por la Rúa do Carme y al poco paramos a desayunar algo con mis nuevos amigos japoneses, el matrimonio formado por Kenji y Maiko.

Después de desayunar y por la misma rúa abandonamos Arzúa. Por medio de prados y pequeños huertos avanzamos en descenso pasando por un gran robledal en el término de As Barrosas. Serpenteando, el camino marcha junto a plantaciones de eucaliptos y pinos. Pasamos el puente sobre el río Raído para llegar a la localidad del mismo nombre.

Tras Preguntoño cruzamos la carretera general por un túnel. Giramos a la derecha y pasamos por Cortobe y Pereiriña para descender por el bosque y cruzar el río Ladrón. Por pista llegamos a Calzada y Calle, y tras cruzar varias carreteras locales alcanzamos Boavista. Al salir de Salceda, que asoma a la N-547, tomamos un camino por el que de nuevo accedimos a la calzada para cruzarla hacia la izquierda.

Por el camino vamos ascendiendo entre el arbolado hasta llegar a Ras. Salimos de nuevo al asfalto, por el que avanzamos unos metros, y de nuevo pasamos al margen derecho hacia las casas de Brea. Tras Rabiña (km23) discurrimos por el asfalto unos metros, cruzamos a la izquierda (área de descanso)y, a la altura del Empalme de Santa Irene, se pasa de nuevo al margen derecho. Junto a los eucaliptos llegamos al albergue de Santa Irene (el pueblo está al margen izquierdo). En el Km 20 cruzamos de nuevo a la izquierda para entrar en Rúa. Un poco más adelante entramos en Pedrouzo tras pasar Burgo. En esta etapa me alojé en el albergue Otero. Al ser la etapa corta comí y cené en restaurante Che, muy bien por cierto.

Esta última etapa no plantea ninguna dificultad y los peregrinos se sienten alegres tras la pronta llegada a Santiago.

Día 19 de Octubre – PEDROUZO – SANTIAGO DE COMPOSTELA (20 km):

En esta última etapa vuelvo a caminar solo, ya me apetecía ir a mi ritmo, salgo temprano, llueve y aún es noche.

Al salir del albergue giro hacia la izquierda y subo hasta encontrarme con el bosque que me lleva hasta Amenal, donde aprovecho para desayunar. Atravieso un puente y la carretera y continuo entre la vegetación hasta Cimadevila, desde donde comienzo a ascender por un camino forestal rodeando el aeropuerto de Labacolla. Bajo hacia el rio Labacolla, y una vez pasado, salvo de nuevo la N-634. Comienzo a ascender por pista asfaltada pasando por Villamaior y, más adelante, junto a los estudios de la Televisión de Galicia y TVE y una fábrica de maderas llego a la aldea de San Marcos, asentada en el mismo Monte do Gozo.

Visito la capilla de San Marcos, el monumento que conmemora la visita del papa Juan Pablo II y por fin diviso la ciudad de Santiago de Compostela. Comienzo el descenso hacia Santiago y me quedan 4,7 km hasta la Catedral, apuro el paso pasando el albergue de peregrinos y continuo por la Rúa do Gozo. Junto a la carretera N-634 cruzo por un puente la autovía A-9, el río Sar y más tarde la vía férrea.

Ya en Santiago de Compostela, entrando por el barrio de San Lázaro, paso junto a su capilla prosiguiendo por el polígono de Fontiña, el barrio dos Concheiros y la Rúa San Pedro. Desde la Porta do Camiño tomo las Rúas das Casas Reais y das Animas para alcanzar la plaza Cervantes. La Rúa da Azabacheria y la Vía Sacra me conducen a la Plaza del Obradoiro, KM0 del camino.

Peregrinación concluida y lo que es más increíble, ni una sola llaga en los pies. El corazón ha respondido perfectamente y el camino me ha ayudado a decidir…..

RUTA DESDE LA CENTRAL DE ZARZO HASTA LAS PIEDRAS GRANDES (río Mandeo) Oct 2013.
Un día mas y disfrutando del "veranito de san Miguel" me he acercado de nuevo al río Mandeo para seguir conociendo mejor cada rincón del Coto de Betanzos y al mismo tiempo seguir con mi entenamiento particular para la realización del camino que comienzo este próximo Domingo.

En esta parte, el río comienza a encañonarse, es curioso, conforme avanzan las estaciones el resultado de la transformación del río. Ahora en otoño, recientísimo el final de la temporada, nos hace ver el rio con cierta nota de tristeza acrecentado, ese sentimiento, por la caida de las hojas de los árboles, aunque todavía se resisten a perder sus hojas, quizás, por este alargamiento del tiempo veraniego aunque según avanzan nuestro pasos paralelos a la orilla del río, nos damos cuenta que estamos en plena estación otoñal.

Según comienzo mi paseo y alertado por un chapoteo en el agua, me encuentro con una pareja de nutrias que se estaba dando su baño de primera hora. Fué un placer poder mezclarme entre la maleza y observar, casi durante media hora, su majestusoso nado, sus zambullidas, sus juegos, ajenas a mi presencia.

Parece que el camino de hoy es un poco tortuoso, pero nada mas lejos de la realidad, este pedregal es solo al comienzo.

Todo el camino perfectamente marcado.

bajo esta pasarela discurren los últimos metros del rio Zarzo antes de alimentar, con sus aguas, al Mandeo.

Precioso afluente el Zarzo, apunto de mezclar sus aguas con el río principal.

El mandeo discurre entre piedras, que me hacen apuntar posturas para posar mis moscas la próxima temporada en busca de salmones, truchas o reos.

Las castañas nos recuerdan en que época del año estamos.

La senda discurre paralela al río y nos permite observar las posturas al mismo tiempo que disfrutamos de un tranquilo paseo en medio de esta fantástica naturaleza.

Algunas setas, ya han realizado su efímera vida, dejando paso a nuevos ejemplares.

Una zona de aguas tranquilas, buenas pozas nos presenta a cada paso el Mandeo.

otoño tiempo de setas

Llegamos casi al final de este tramo, esta enorme balsa nos lo recuerda,

Por encima de la balsa, el río comienza a mostrarnos preciosos saltos, cascadas, y cada vez se estrecha mas.

El río con este buen tiempo que estamos disfrutando nos ofrece imágenes preciososas y mostrando la calidad de sus aguas libres de núcleos contaminantes e industrias en sus cincuenta y seis kilómetros de recorrido desde su nacimiento en el Marco das Pías en Sobrado.

Una de las caracteristicas de toda la ribera del mandeo es su frondosa vegetación.

A partir de aquí el río cada vez se encañona más y enormes piedras graníticas casi lo ciegan. Volveremos a encontrarlo dispuesto para la pesca, aguas arriba en al zona conocida como las Balsas., objetivo de nuestro próximo paseoa orillas del Mandeo.

Todavía el río con el cauce bajo nos permite seguir disfrutando de la visión de alguna trucha, antes de la llegada de tiempo mas invernal donde se retirararn de nuestra vista para buscar el amparo de aguas mas resguardadas.

Este tramos que hemos conocido hoy aguas arriba de la central de Zarzo nos sumerge en las zonas de freza.

RUTA CHELO - CENTRAL DE ZARZO (río Mandeo) Oct.2013

Cumplida la pasada noche del 30/9 al 1/10 un año, que sufrí un fuerte infarto, que me ha dejado el corazón bastante dañado y como reto personal, ha sido un año difícil entre la salud y lo laboral, llevo una temporada, "entrenando" , caminando un poco más duro de lo normal, con el fín del proximo dia 13, realizar desde O Cebreiro, un agradable paseo que me lleve durante siete jornadas, recorriendo caminos y rios de Galicia, hasta Santiago de Compostela.

Hoy he realizado una ruta por la parte baja del río Mandeo, en la parroquía de Collantres, municipio de Coirós, entre la pasarela de Chelo y la central de Zarzo (unos 6 Km en total), con el fin de caminar por un suelo húmedo y desigual, con contínuos cambios, subiendo, bajando, zona de piedras, etc.

El carácter montañoso y abrupto del entorno, y lo frondoso de la vegetación,conforman un hermoso paisaje, declarado paisaje pintoresco en 1.971. además, este enclave, de visita obligada, se encuentra dentro del espacio natural protegido LIC Betanzos-Mandeo, perteneciente a la Red Natura 2000 de Galicia, formando también estas tierras del Mandeo parte de la Reserva de la Biosfera junto a la comarca Das Mariñas.

El exuberante bosque de ribera que enmarca al río Mandeo, se encuentra compuesto por especies como los alisos y los sauces. En las zonas mas alejadas del agua, son los avellanos, castaños, abedules, fresnos y robles los que adquieren mayor representatividad.

Entre la fauna que habita en la zona destacan el preciado salmón, el reo, la trucha común, la salamandra, los mirlos, el martín pescador, el azor o gavilán. También se encuentran presentes el zorro, el tejón y la nutria, mas esquivos, pero de los que no es difícil encontrar huellas u otras señas de su paso.

Estamos ya en otoño y comienzan a aparecer las primeras setas y otros pequeños animalillos propios del terreno húmedo.

Cabe decir, que el río Mandeo es uno de los pocos cauces de Galicia que el salmón remonta en su migración, por lo que este tramo de río es muy valorado por los pescadores. Existen, incluso, zonas de pesca adaptadas, accesibles a personas con movilidad reducida.

Primera presa aguas arriba desde Chelo

Estos saltos del agua entre piedras uan inivtación a paracticar con la caña Tenkara.

A medio camino de la central de Zarzo tenemos esta pasarela que nos permite cambiar de orilla.

El rio viene turbio y algo mas alto que dias a tras, la lluvia tormentosa de estos dias ya se ha dejado notar y por supuesto, la central que esta turbinando.